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Plata coloidal
La palabra coloide se refiere a un elemento en suspensión en otro medio, en este caso nanopartículas de plata en suspensión en agua de alta pureza.
La plata coloidal es el bactericida, antibiótico y fungicida de amplio espectro más eficaz que se conoce. Está demostrado que ninguna bacteria, virus, levadura, hongo o microbio puede sobrevivir al estar en contacto con una única partícula de plata.
Las virtudes de la plata son conocidas desde hace mucho tiempo, antiguamente era una práctica extendida poner monedas de plata en la leche o el agua para alargar su conservación.
Es evidencia científica el poder antiséptico de la plata, capaz de eliminar 100 veces más bacterias que el resto de antibióticos, como también lo es el hecho de que en su forma coloidal, con tamaños comprendidos entre 0,01 y 0,0001 micrones, no puede llegar a acumularse en el organismo dado su ínfimo tamaño.
Es, además de un potente desinfectante, un excelente antioxidante a nivel celular, ya que estas pequeñas partículas son electrones de plata con una pequeña carga eléctrica negativa que contrarresta a los radicales libres, protegiendo del envejecimiento celular, acelera la cicatrización de heridas, fracturas y protege ante muchas enfermedades como el cáncer.
Este remedio se elabora mediante una electrolisis en agua destilada de alta pureza con dos electrodos de plata pura al 99,9%, obteniendo así nanopartículas de plata en suspensión en este líquido, dotadas de una pequeña carga eléctrica que hace aumentar considerablemente su reactividad con los organismos unicelulares haciendo que estos “aspiren” los coloides de plata. Al ser administradas, estas partículas son rápidamente absorbidas por el sistema retículo endotelial, igual que hace esta parte del sistema inmunológico con todo patógeno o elemento extraño que se encuentre en el organismo, poniendo así ambos en contacto; esto hace que cualquier patógeno vea desactivadas las enzimas que usa para el metabolismo del oxígeno, causando así su “asfixia” en pocos minutos. Por esta razón, no pueden llegar a generar resistencia alguna o mutaciones que les permitan sobrevivir a sus efectos, al contrario de lo que sí ocurre con los antibióticos convencionales. Acto seguido, el organismo se deshace de los gérmenes muertos y los coloides de plata.
La plata, a diferencia de otros antibióticos, no destruye la flora intestinal benéfica ni cualquier enzima del cuerpo humano, esto es porque solo ataca a las formas de vida unicelulares, totalmente diferentes a las de los organismos pluricelulares.
La lista es larga, aquí exponemos algunos de los usos que se le da a la plata coloidal con excelentes y rápidos resultados: fiebres, resfriados, pulmonías, neumonías o cualquier proceso gripal o vírico; en casos de fracturas acelera la solidificación del hueso; intoxicaciones alimentarias y diarreas; úlcera de córnea; otitis, apendicitis y faringitis; infecciones y quemaduras; caries y gingivitis; acné, herpes; muchos tipos de cáncer; llagas, hongos y olores corporales; varicela, sarampión, lyme… en definitiva, la plata es fulminante contra enfermedades desencadenadas por cualquier virus, hongo, bacteria, microbio o levadura.
No se conoce, utilizando coloides de plata pura obtenidos mediante una electrolisis controlada, ningún efecto adverso ni interacción con otros medicamentos o tratamientos, dado que este metal no se oxida ni interactúa con otros elementos, además las nanopartículas de plata son rápidamente expulsadas del organismo al ser estas capaces, por su tamaño, de atravesar las células sin poder llegar a acumularse. Hay que destacar que la plata en su forma coloidal no está fabricada a partir de sales de plata disueltas en un líquido, ni está formada únicamente por iones de plata, este tipo de productos, al igual que el oligoelemento plata, obtenidos mediante procesos químicos, en casos de sobredosificación pueden causar Argiria: oscurecimiento de la piel y glándulas mucosas. Esta enfermedad no es posible que se desarrolle utilizando los coloides, obtenidos por un proceso fisicoquímico a partir de plata pura.
Es por todo esto que se considera a este producto como “un potente segundo sistema inmune” del que todos podemos disfrutar sin ningún tipo de efecto secundario.
Con la llegada de los antibióticos alopáticos patentables, con el negocio que esto representa, el uso de los coloides u otros remedios, pese a sus sorprendentes cualidades, fueron quedando en el olvido. Pero hoy en día esto está cambiando y, sin duda, se convertirán junto a otras terapias como el CIO2, en las medicinas del futuro.